LA INFANCIA, UN TIEMPO ÚNICO

Durante estos días hemos estado hablando en clase sobre los animales que habitan en Egipto.
Los más conocidos son los cocodrilos y los camellos.
La ubicación del Cocodrilo se extiende a todo lo largo del río Nilo y en toda África al sur del desierto Sahara.
Hemos conocido que cuando son pequeñitos, como el que tiene Hugo del Valle en sus manos, se alimentan de insectos acuáticos y arañas. Cuando son más grandecitos empiezan a comer peces y ya de adultos comen peces si no logran atrapar un mamífero.
Pueden llegar a medir 6 metros y pesar más de una tonelada.
¡Qué valiente fue Hugo para coger el cocodrilo! -comentamos todos en clase.
Él nos dijo que vió a este cocodrilo en el circo cuando lo llevó su papá. Y a raíz de ahí, otros peques dijeron que también lo habían visto. Que un hombre jugaba con él, poniéndole la mano cerquita de sus afilidos dientes, pero que el cocodrilo no fue capaz de atraparlo en ninguna ocasión.

En cuanto a los camellos, hemos conocido que habitan en los desiertos, y que son los transportes vivientes de este lugar. Gracias a ellos, podemos conocer los innumerables símbolos que identifican las tierras egipcias: esfinges, pirámides, los mares de arena ...
Son animales que pueden llevarse días sin beber agua y se les emplea como animales de carga, aunque también se aproveche de él su piel, su carne y su leche.